dimarts, 1 de setembre del 2009

The Emerald Isle

"The Emerald Isle" es el segundo nombre que se le da a la isla de Irlanda por los tonos verde esmeralda que se perciben des de las alturas. Irlanda es un país con orígenes que se remontan a las invasiones viquingas, normandas e inglesas, con varios años de guerras e invasiones por toda la isla. Éstas han permanecido hasta hace pocos años debido a las guerras civiles irlandesas y la ruptura de la Isla en dos partes diferenciadas.

Irlanda, pues, se compone de dos partes diferenciadas. Por un lado encontramos Irlanda del Norte, con capital en la ciudad gris de Belfast. Esta región pertenece a Gran Bretaña (junto a Gales, Escocia e Inglaterra) pero no al Reino Unido ya que este último está compuesto por diversos reinos del que Irlanda no forma parte como país entero. Por otro lado, desde más o menos la mitad del país hasta el sur, encontramos la República de Irlanda, con la cosmopolita Dublín como capital de la región independiente de la influencia del gobierno inglés.


La bandera irlandesa. La bandera irlandesa simboliza la paz (blanco) entre los nacionalistas (verde) y los unionistas (naranja). En otras palabras, simboliza la paz entre Irlanda del Norte (verde) y la República de Irlanda (naranja).



Dublín.


Dublín nació aproximadamente al 1117 aC. La capital de la República Irlandesa mantiene una fuerte conciencia social y personal con el pasado y los hechos históricos que la han forjado al lado de los años.

Por una parte, la ciudad se muestra orgullosa de su pasado vikingo y celta, de los cuales quedan diversos castillos e iglesias que muestran al visitante de dónde son las raíces dublinesas.

Las guerras civiles, el episodio de la Segunda Guerra Mundial y los ataques del I.R.A. han hecho huella en la capital de la zona independiente y todos sus habitantes tienen memorizados los nombres, los acontecimientos, las anécdotas y las imágenes que se vivieron.

Dublín está dividida en dos partes (norte y sur) por el río Liffey, que anteriormente se reconocían como las partes altas y bajas de la ciudad. Actualmente, esta distinción ya no existe pues puedes encontrate calles obreras al lado de O'Connell Street, Dame Street y Grafton Street; las tres principales que cruzan y siguen al río.

En sólo 4 semanas, me he ddo cuenta que los duublineses son muy conscientes de dónde provienen y cuánto han sufrido, por ello, preguntes dónde preguntes, todos te cuentan la historia de la ciudad, de distinta forma, pero con los hechos inamovibles.

Dublín es una ciudad gris y cosmopolita a la vez. Bares y pubs inundan todas las calles, sin dejar ningún rincón por cubrir. Monumentos, estatuas e inscripciones recuerdan a los habitantes sus raíces, mientras que los castillos se los miran con recelo.

Es una ciudad en crecimiento, con un tráfico espantoso a las horas puntas y con las calles limpias. Los edificios siguen el mismo patrón: una arquitectura encantadora comparable al estilo gótico de Amsterdam y con las fachadas multicolores producidos por la vejez de las mismas o por el simple color de las paredes.

En Irlanda en general no llueve de la misma manera que en Escocia pero llueve cada día. Hace cuatro años que en verano llueve y las temperaturas son bajas, cosa que según sus habitantes no es normal. Pero visitar Irlanda es visitar a la lluvia (intermitente, tormentosa, duradera, ...) y a temperaturas moderadas en verano y primavera mientras que en invierno y otoño se respira aire helado mientras nieba. Es recomendable vistar Irlanda en época de verano debido a que en invierno, las horas de sol escasean y sólo hay unas cuatro o cinco horas de luz al día.

En las 4 semanas invertidas a Dublín, he abierto el paraguas dos veces y no han durado más de dos minutos los dos. Según me comentaron, llovió cada día por las noches, a partir de las 3 de la mañana. Pese a no prcibir mucha lluvia, sí que era muy normal ver llover a cántaros durante cinco minutos y parar de golpe.
El frío caló más hondo y el abrigo y un par de jerseis nunca se quedaron en casa. El sol nos saludó todas las mañanas y persistía bastante durante el día.

Pese a eso, para los que sufren el calor español, Dublín es el destino ideal para pasar un verano tranquilo, sin sudar y sin quemarse por el sol.




College Green Street



Fleet Street









Castle Street




Essex Street West




Dame Street

Cap comentari:

Publica un comentari a l'entrada